Hoy, en ARSEPRI, rescatamos este interesante artículo en el blog de Nicolás Martín para ayudaros a comprender esta cuestión tan importante. Ejercitar tus derechos mediante una demanda puede suponer una especial protección para el empleado.
Veamos:
La garantía de indemnidad protege al trabajador frente a las represalias de su empresa por ejercitar sus derechos laborales.
Esta garantía funciona en doble sentido. Muchos trabajadores no denuncian ni ejercitan sus derechos por temor a que la empresa les castigue con el despido, sin subida de sueldo, etc. También muchos empresarios piensan que en cuanto un empleado demanda o se queja, debe acudirse al despido como represalia. Pues, tanto uno como otro deben saber que:
- Empresario: ese empleado que ha solicitado se le abonen horas extras, se le actualice su sueldo, se le promocione, etc. desde el momento en que ha ejercitado ese derecho goza de una especial protección y su despido puede ser nulo.
- Trabajador: puedes ejercitar tus derechos no sin temor a un posible despido, pero si sabiendo que de producirse la ley te protege y tu despido podrá ser nulo y volverás a tu puesto de trabajo.
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