Al parecer, la intervención del auxiliar y del vigilante de seguridad, habría estado condicionada por la orientación sexual de una pareja de hombres que mostraban una «actitud cariñosa» en público pero que en ningún momento alteraron el orden del establecimiento. De momento, tanto el auxiliar como el compañero han sido imputados por un presunto delito de odio pero aún está por ver qué pasara con este asunto.
Para leer más: europapress.es