Se ubicará dentro del perímetro de la M-30 de Madrid, a menos de cinco minutos de una parada de Metro, Cercanías o autobús y tendrá que disponer, como mínimo, de una de las siguientes medidas de seguridad en el acceso al inmueble: cámaras, un vigilante, un portero físico o un videoportero.
Ver noticia completa:elmundo.es